domingo, 24 de mayo de 2020

EL CIELO ESTÁ TAN ALTO



Ya tiene título la segunda parte de EL DÍA QUE FUIMOS DIOSES. Fue la primera novela que publiqué, durante la próxima primavera se cumplirán 10 años ya, cómo pasa el tiempo.

La vida es impredecible y ese es, sin duda, uno de sus muchos encantos. No tenía previsto yo acometer este año este proyecto que, si bien es cierto, que me rondaba en la cabeza desde el mismo día que publiqué ELDQFD, no encontraba hueco ni oportunidad en mi siempre apretada agenda.

La verdad es que EL DÍA QUE FUIMOS DIOSES  está encantando a una segunda generación de lectores que se está acercando a este libro con motivo de nuestra campaña de fomento de la lectura para el Quédate en casa por el Covid-19.

Y para mí esta novela, en términos literarios, fue como mi primer gran amor, nunca se olvida. Inclusive mucha gente me dice que no he logrado superar todavía la cota que marqué con esta historia.

Quizá un poco por todo lo anterior, también por el décimo aniversario que se cumplirá, ya digo, el año que viene o, por la entrada de la primavera y la salida del confinamiento y, sobre todo, porque de repente me apetece muchísimo rejuvenecer y meterme en la piel de unos personajes a los que amé tanto, me he liado la manta a la cabeza y me he metido con pasión en este proyecto que me llevará de la ídem, lo sé. Además en un año que lo tengo absolutamente "full" como dirían los británicos. Pero el reto me apasiona y las dificultades me motivan y, cuando decaigo, me acuerdo del título que tendrá: "El cielo está tan alto". Es decir, lo bueno, léase el amor por ejemplo, cuesta alcanzarlo. Y qué decir de escribir una buena novela.

Lo siento por mi entrañable e interminable historia de "El astrónomo", que vuelve a ser postergada por este nuevo amor que emerge con tanta ilusión, con tanta fuerza. Ya le llegará su hora. Es una amante abnegada y fiel a la que yo dejo una y otra vez, pero sé que siempre me espera.

Si no pasa nada calculo que para Navidad tendré un primer borrador y, a partir de ahí, el reto será publicar EL CIELO ESTÁ TAN ALTO a los diez años más o menos de su predecesora, la para mí inolvidable EL DÍA QUE FUIMOS DIOSES.

Para los lectores que no hayan leído ELDQFD, ahora tienen la oportunidad de descargarla a un precio irrepetible durante los últimos días de campaña.

Ver el book trailer de la novela:https://www.youtube.com/watch?v=xbq9O0uD2jI

Ver promoción especial campaña COVID-19:
 https://www.franciscorodrigueztejedor.com/promocion-actual


lunes, 18 de mayo de 2020

VICTORIA






       ¡Cuántos proyectos calendados para 2020 hemos tenido que olvidarlos, aplazarlos, reconvertirlos! E, inclusive, todavía no sabemos ni qué hacer con algunos de ellos. Este reto, este problema, nos afecta a casi todos. Nosotros teníamos una película de cine educativo muy avanzada: la segunda parte de Semillas de Alegría que contaba con guión, elenco artístico y técnico, diseño de producción, etc. Ha habido que aplazarlo todo a marchas forzadas. Todavía no sabemos cuándo abrirán los colegios, ni de qué modo, ni cuándo podremos rodar con niños. Ha sido un bajonazo tremendo.
        Pero…, de repente, hay unos días de buenas noticias, el confinamiento parece que llega a su fin y la primavera llama a nuestra puerta con sus nuevos ropajes llenos de luz y de alegría. Y la mente de las personas, por una inercia irrefrenable empieza a pensar en el futuro, a soñar en recuperarse de este batacazo y en volver a empezar. Así lleva el mundo desde que es mundo, levantándose una y otra vez después de cada postración. En nuestro grupo de productores, los más jóvenes son los primeros que han tirado hacia delante: la fuerza y la imaginación y la creatividad de la juventud son imparables. Los más mayores solo ponemos la sensatez y la experiencia para canalizar la fuerza de esta tromba de agua nueva y que no se desboque. Un grupo unido y con ganas, en cada instante, da pasos de siete leguas. Habrá nueva película. Por Dios que la habrá. Solo pedimos que el virus nos respete julio y agosto. Y ya tiene nombre. No podía ser otro. Se llamará Victoria. Por lo menos la moral de la ídem no nos falta.





       Las personas al final siempre acabamos echando globos al cielo. Con la esperanza de que alguno llegue a las estrellas. Hoy precisamente me dice mi agente que más de mil quinientos nuevos lectores han adquirido mis libros, de un escritor emergente y poco conocido, ojo, en España y en América, en nuestra reciente campaña de libros gratis y baratos para el Quédate en Casa. A diez horas por libro, eso supone que se invertirán 15000 horas en soñar, en olvidarse de la realidad, quizás para mejorarla o, simplemente, para hacerla más llevadera. Porque la gente, como en el título de nuestra película, quiere volver a sentirse bien, quiere volver a ganar.

  

https://www.franciscorodrigueztejedor.com/promocion-actual

lunes, 4 de mayo de 2020

ABSOLUTAMENTE



Aunque haya oro y riquezas esperándome
o me presenten los amigos
a las mujeres más hermosas.
Ya sabes que yo siempre
me quedaré contigo.
Que para mí serás,
eternamente,
 la reina más valiosa

Y no habrá nada,
ni nadie,
que nunca nos separe.
Porque siempre serás
mi dios,
mi todo.
El amor de mi vida,
que reinará,
absolutamente,
sobre todas
las cosas.



Este poema apareció parcialmente en mi novela “Memorias del Sauce Curvo”, publicada en 2015, como parte de una supuesta canción flamenca que escuchaba el protagonista  con una amiga mayor que él en la radio del coche. Ella reprochaba a un antiguo novio que no hubiera cumplido con su palabra de amor.
 Ya es hora, pasados cinco años largos, de que se le reconozca su paternidad al poeta que lo concibió.

Copyright Francisco Rodríguez Tejedor