ESE MOMENTO (Para "Mil palabras para envejecer bien")
ESE MOMENTO (Para "Mil palabras para envejecer bien")
Un día de estos
voy a rasgar todos esos papeles,
que me encadenan
a la vida ordenada y lenta
que por edad me toca.
Voy a abrir la jaula
con esos barrotes dorados,
y extender de nuevo
las dormidas alas
otra vez al amanecer.
Sí, cogeré el martillo
y romperé todos esos espejos,
como aluniza un coche
contra un escaparate
en el que no me veo.
Un día de estos
te voy a empujar contra la pared
y voy a hablarte al oído
con los borbotones
de la pasión y del instinto
que se me despiertan de nuevo.
Sí, la vida me está volviendo a empellones
a golpes de sangre y de impulsos fieros,
cual animal enjaulado
que busca la puerta
para revolverte el pelo.
Quiero volver a arañarte el alma,
besarte dentro de ti,
volver a los caminos inciertos,
perdernos en la noche estrellada
y no regresar jamás…
Vivir otra vez a borbotones.
Arrancar las hojas del calendario.
Hacernos una barquita con ellas.
Y navegar…
Con este poema abro oficialmente mi nuevo libro MIL PALABRAS PARA ENVEJECER BIEN, que no sé cuándo terminaré, si es que lo termino. Tengo tantos proyectos que se me amontonan en mi mesa de trabajo y en mi corazón. Hará trilogía con MIL PALABRAS PARA EL OPTIMISMO Y MIL PALABRAS PARA LA FELICIDAD, al que podríamos añadir también LOS MEJORES 101 MOMENTOS DE AMOR e inclusive POESÍA, VIDA MÍA, el conjunto de mis libros más personales.
Y luego todas esas cosas que me distraen, como la declaración del IRPF en estos días, uno no es que tenga muchas cosas, pero sí muy variadas, que diría el otro, y todo se llena de complejidad.
Así que, un poco para dar pena: llevo como un 30 por ciento de mi novela "El donante", a la que cojo un día y olvido dos. Hoy me pide Manuel Serrano que adapte mi guión del corto "Por fin me jubilo" a la geografía navarra, me estoy documentando para "Lejos del sauce curvo" y, ahora, para "Mil palabras para envejecer bien". Trabajo de vez en cuando con una productora de Costa Rica en el guión de "Viejos en apuros", también para Manuel Serrano y tengo aparcada la segunda parte de "El día que fuimos dioses". Y, sobre todo, también quiero vivir. Ah, y menos mal que mis hijos se han olvidado por el momento de "Directivos", que no nos oigan, que si no directamente me suicidaba. Les doy pena, ¿verdad?
Últimamente no te vemos el pelo, trabajando y quedándote en la oficina a estudiar hasta las dos de la mañana, preparándote para el gran examen de dentro de una semana, ¡es lo que debes de hacer! ¡Aunque cuesta!
Te gusta plantearte retos como este, no lo has terminado y ya nos comentas que te estás planteando más para el resto del año. Te lo pide tu edad y tu fuerza, ¡muy bien!
Son días duros para ti. Llenos de trabajo y de incertidumbre sobre si lo conseguirás. Así que el cumple lo celebraremos como Dios manda cuando todo pase.
Pero queremos recordarte algunas cosas, por si dudas de tus capacidades, no las olvides en estos días donde vas a tener que echar el resto en tu preparación. Ahí van, ¡y también con algo de humor!
Cuentas con el total apoyo de tu Uni que, por algo será, buscó en ti a ese estudiante franquicia para sus campañas de marketing durante varios años.
Y no fue casualidad. Antes, el BBVA ya te distinguió en una de sus Rutas más difíciles, la de la conquista de la selva del Darién en Panamá, donde 250 estudiantes de 50 países repetisteis la hazaña de Vasco Núñez de Balboa.
A Clemente Cebrián, fundador y CEO de El Ganso, uno de los grandes emprendedores españoles, le encanta tomar cervezas contigo y hablar de negocios y de moda, esa que a ti te gusta.
Y los chinos no te pierden ojo.
De economía y de finanzas, qué vamos a hablar. Aquí, con el Vicepresidente del Banco Central Europeo y exMinistro de Economía español, calibrando la situación.
Hasta el Rey de España, recuerda, sigue tus pasos.
Y la tele, ni te cuento.
Pero, sobre todo, lo más importante, tienes, desde siempre, a tu lado, escuchándote, apoyándote, queriéndote, a tu FAMILIA ¡No lo olvides!
A tu lado, siempre, compartiendo los momentos más especiales, los buenos y los malos ¡Ánimo, campeón! ¡Te queremos!
Así que, vamos a por el CFA y, si es necesario, al abordajeeeee!
29-10-74
"...El domingo no fui a misa. Fue casi deliberadamente, no era la primera vez, pero lo que sí era nuevo fue que le dijera prácticamente a la cara a papá que no iba, antes siempre le había mentido.
No tenía ganas de ir, y lo encontraba ridículo, necesitaba –lo digo sinceramente– salir, juntarme con alguien, hablar con alguien. Ya sé que en la iglesia y en misa se puede hablar con Dios, es más únicamente se va allí a eso, pero tengo tantos prejuicios formales, artificiosos y hasta sensibleros que, cuando lo hago, parece que estoy representando una comedia o farsa. Quiero que las cosas sean más auténticas, sobre todo en este aspecto que reconozco (el de la religión me refiero), uno de los más fundamentales de la vida.
Creo que mi educación arrastra un déficit en este sentido, o más que déficit un exceso de banalidades, tradicionalismos, superficialidades y cosas sin sentido, con las que no me encuentro nada a gusto, pero con las que –dado los perjuicios que suponen– reconozco que me va a ser bastante difícil desechar.
En este sentido voy buscando –para no mentir no de una manera total y constante– una renovación. También tengo miedo de renovarme en este aspecto equivocadamente, lo que sería luego un retraso y un lastre descomunal.
Así pues, en estos momentos estoy vacío, abandonando mis inercias pasadas pero sin encontrar aún nuevos asideros. No me quiero atar definitivamente a nada, sin saber lo que es, lo que significa en sí, lo que significa para mí y, sobre todo, sin experimentar y comprobar (en la medida de lo posible) que los elementos de esa renovación espiritual no son huecos, artificiosos y carentes de profundidad.
Me tiraría discutiendo sobre estas cosas horas y horas. El reloj manda. El viernes, uno de noviembre, espero agotar la pluma. ¡Hasta mañana!".