Aquí estoy tras mi largo viaje,
desarmado, solo
y ligero de equipaje.
Nada me diste
sino un montón de dudas
y nada te entrego
un corazón a oscuras
Llevé el amor por bandera
Viví como un hombre
bajo la luna llena
Nada me diste
y nada te entrego
Dejé mi sangre
por el sendero
¿Habrá alguien que recuerde mi
nombre
cuándo yo no esté?
¿Acunará la lluvia la melodía de
mis versos en alguna perdida escuela
cuando ya me haya ido?
Me entrego aquí
con lo que soy y
con lo que pude haber sido
Dios mío, no sé si te amé,
pero le cogí cariño
a todas las flores del camino...
Más allá de las adelfas
hay un lugar para el sueño.
Dame tu mano y entremos
cierra la puerta
y enciende el leño...
Más allá de las adelfas
hay un lugar de recreo.
¿Te acuerdas que ya estuvimos?
jugábamos al veo, veo…