martes, 8 de abril de 2025

TODA UNA VIDA

 


Llega otro año más. Hasta conformar toda una vida juntos. Miro nuestros comienzos: ese "Tal como éramos" que he ido construyendo con las imágenes nuestras que han sobrevivido al paso del tiempo. Aquellos momentos de vino y rosas envueltos en aquel amor que arrancaba lleno de ilusión y de vida.

Tal com éramos 1: https://www.youtube.com/watch?v=4zTPBFiKzhQ

Tal como éramos 2:https://www.youtube.com/watch?v=sSOmsY3aU_Q



Y miro esta foto que te he hecho hace tan solo unas horas. Es fácil seguir enamorado de ti. Ha pasado el tiempo, pero no ha borrado tu sonrisa. Ni tu alegría. Ni la viveza de tus ojos. Ni tus ganas de conversar. Todo lo que me encandiló entonces, permanece. Y, a estas alturas, como nos decimos a menudo, ya no va a cambiar. Toda una vida juntos: la que ya hemos vivido y la que nos queda.

Encuentro este poema que escribí hace unos cuantos años y que forma parte de ese libro especial: Treinta y cinco gramos de oro. En él ya estaba todo esto que te digo hoy. Se llama precisamente "Hoy como ayer".


HOY COMO AYER


Tu sonrisa me seduce,
alegría y luz que sube a tus pupilas,
y a las mías, al verte.
Me seduce la armonía de tus labios.
La música de lluvia que cae sobre la tierra húmeda
que me trajeron tus pasos, me seduce.

Me seduce cuando caminas a mi lado
y vemos el mismo mundo
de forma tan diferente que nos hace reír.
Me seducen tus ojos chispeantes y risueños,
verte feliz me seduce,
acompasar nuestro paso.

Me seduce ver pasar los años contigo.

Amarnos por el día, me seduce,
con nuestras pequeñas cosas y nuestras rutinas.
Me seduce tu amor de noche,
cuando creamos nuestro mundo de dulzura y pasión,
bajo las estrellas que nos miran,
tu amor me seduce.

Me seduce ese mundo de recuerdos
de todo lo que hemos hecho juntos,
envejecer contigo me seduce.

Me seduce pensar en ti,
en tu compañía,
vivir los días que vendrán, me seduce.

Simplemente te quiero decir
que me seduces tú.
Como la primera vez que te vi,
como ayer,
como siempre,
me seduces.


Brindo por este año tan especial para nosotros. Y brindo también por el resto de nuestra vida juntos, que espero que sea larga y fructífera. Y tan feliz como lo ha sido siempre. Muchas gracias por todo ello.

miércoles, 2 de abril de 2025

TE QUEDAS CONMIGO

 


Hoy hubieras cumplido cien años, quiero decir que hoy cumples cien años, porque yo creo firmemente que sigues vivo en la otra vida. Siempre fuiste un hombre sabio, así que ahora lo serás mucho más. Dará gusto hablar contigo cuando nos veamos, que será en nada, el tiempo pasa rápidamente.

Como siempre, ahora saldremos a encenderte una vela en la iglesia del barrio, una sencilla liturgia para recordarte que te recordamos, yo, todos los días.

Hace ya más de cinco años, cuanto te fuiste escribí este "Te quedas conmigo". No cambiaría de él ni una coma. De hecho, forma parte de mi última novela: "Regreso al Sauce Curvo". Tu Sauce Curvo. ¡Feliz cumpleaños, papá! ¡Siempre en mi memoria!


TE QUEDAS CONMIGO

            Cuando te fuiste me dijeron los familiares y amigos: “Ahora tendrás que aprender a vivir sin él”. Pero ha pasado ya el tiempo suficiente para saber que no será así, porque te quedarás siempre conmigo.  Me diste tu nombre y un millón de cosas más que fui descubriendo con el tiempo, inclusive sigo haciéndolo todavía ahora, quiero decir ahora inclusive más.
            En mi libro “Memorias del Sauce Curvo”  sabes que escribí que los primeros años de nuestra vida generalmente están iluminados por el resplandor de la madre, pero que cuando la figura del padre emerge, se destapa por fin, te das cuenta de que su influencia será igual de significativa y tremendamente especial si eres también hombre. En dicho libro, aunque es una novela de ficción, cuento muchas anécdotas verdaderas que tuvimos juntos, como aquella en que me salvaste la vida cuando nuestro carro volcó en los verdes campos del Unquer.
            Muy pronto descubrimos juntos que yo sentía, me emocionaba, mayormente como mamá, pero que mi cabeza, mi manera de pensar, eran terreno tuyo. Y a eso te dedicaste con ahínco y perseverancia. Durante toda tu vida, sin cejar ni un solo día en tal empeño.
            Me enseñaste a leer textos varios años antes que en la escuela y, sobre todo, números interminables de trillones y trillones.  A tocar la guitarra, aunque nunca se me diera bien, que tú sabías de oído como músico de ronda del pueblo que eras y a jugar a las cartas en las tardes lluviosas de invierno. A ser un buen hortelano y a cuidar la tierra, a disfrutar del buen comer y del buen vino pero, también, a dejar de fumar si te lo propones y, sobre todo, a amar los libros, de los que tú te leías en tu última época más de cuarenta al año,  principalmente de la Guerra Civil.  Y, por supuesto, todos los míos y varias veces, porque has sido sin ninguna duda mi mejor lector. Un lector elogioso y animoso pero, también, exigente y crítico.
            Me disteis una gran formación en momentos dificilísimos para vosotros,  y te preocupaste de encaminar mis primeros pasos laborales. Puedo decir que lo más importante que sé de los negocios lo aprendí, no en la universidad, sino contigo, cuando tú cerrabas las compraventas o los alquileres inmobiliarios que te agenciabas, y yo, un joven estudiante entonces, me encargaba de redactar los contratos. “Pero, papá, yo no domino esto, solo corto y pego de aquí y de allá.” “No te preocupes, hijo, lo más importante es la cara de la persona y este no nos va a fallar”, decías. Y así era.
            Hemos tenido millones de conversaciones durante todos estos años, y hemos dado miles de paseos en Madrid o en El Sauce Curvo,  y puedo decir, sin miedo a equivocarme, que no me he tomado con nadie tantos vinos y cervezas como contigo, en los innumerables bares y cafeterías en los que quedábamos para hablar de tu vida, de la mía y de esta en general, y a las que tú acudías con tu inseparable periódico “El Mundo” bajo el brazo para llevar ventaja e intentar ganar todas las batallas dialécticas. Porque los hijos, ya lo sabes, crecemos más rebelándonos contra nuestros padres que acatando sus consejos. Y nosotros discutíamos tanto como nos queríamos, es decir, muchísimo. Pero siempre nos fuimos leales el uno al otro, empezando por la misma mujer que ambos amábamos. ¡Qué hubiera sido de mí, sin ti!
            Tomamos el último vino el día anterior a tu breve y postrera estancia en el hospital y me demostraste que es posible  esperar la muerte sentado tranquilamente a la puerta de tu casa, como se espera al autobús que llega puntual a su cita. En tu caso pasados ya los noventa y cuatro años. Una vida completa.
            Siempre fuiste para mí, y sigues siéndolo, una roca gigantesca, un cimiento lleno de amor propio, de resistencia, de fortaleza y de ambición para tu familia, curtido en una época dificilísima y llena de escasez.
             Y sé, además, lo más principal de todo: que yo he sido, y soy, (como mi hermana, por otra parte, lo es en hija), el hombre más importante de tu vida...   ¿Por qué entonces voy a vivir a partir de ahora sin ti?
             Si ahora además es inclusive más fácil todavía, porque ya no tengo que coger el teléfono para llamarte, ni tú ponerte los audífonos para  entenderme.
             Ni siquiera, ya lo ves, tengo que ir a tu casa, o tú a la mía, o a una cafetería, para estar un rato juntos.
            Y hablar de nuestras cosas y del mundo. Como hemos hecho  siempre.
           Porque tú nunca me has abandonado, digan lo que digan. Y yo sé, además, que siempre te quedarás conmigo.

lunes, 31 de marzo de 2025

EN PROFUNDIDAD

 



EN PROFUNDIDAD

Pocas veces me han realizado una entrevista tan en profundidad, como la que me hace ese gran poeta,  relatista, editor y divulgador cultural que es Alonso de Molina, para su revista DE SUR A SUR, la revista para los escritores y poetas de España y Latinoamérica, que impulsa también la autora Libertad González. 

https://www.desurasurediciones.com/alonso-de-molina-entrevista-al-escritor-espa%C3%B1ol-francisco-rodr%C3%ADguez-tejedor/

Por supuesto, os animo a echarle un vistazo, pero, también, a que hojeéis la revista, donde colaboran una interantísima pléyade de escritores y poetas en español (este número se puede descargar gratuitamente). 

Los escritores  que empiezan o que sienten la inquietud de  escribir algún día, encontrarán muchas sugerencias y servicios para dar forma a sus sueños.Como decía Joan Didion: «Escribir es un acto de descubrimiento; a veces no sabes realmente lo que piensas hasta que lo pones en palabras”.

Y, si escribir es un placer, leer es mucho más, según nos dejó dicho el gran Jorge Luis Borges:  «Que otros se enorgullezcan por lo que han escrito, yo me enorgullezco por lo que he leído». ¡Feliz lectura, amigos!

sábado, 29 de marzo de 2025

AQUELLOS QUE NOS DUELEN

 

Todos los días me acuerdo de ti. Sin dejar ni uno solo.

Pero hay días en que más. Como hoy. Debe ser la cercanía de tu cumpleaños y que mañana iré a verte a Sace.

Cuando te fuiste, un agosto de hace ya cinco años, escribí un poema lleno de ausencia y de dolor. Un gran poeta y amigo lo recitó. Y hoy lo escucho y me siento todavía más cerca de ti.

https://www.youtube.com/watch?v=LcgNuQXOZtI

martes, 25 de marzo de 2025

LA PRIMAVERA: UN AUTÉNTICO REGALO.





UNA MAÑANA DE PRIMAVERA

 

       De repente: una mañana. Tal vez ha sido por  el tradicional cambio de hora. O, quién sabe por qué. Descorres el visillo que inaugura el mundo  y un torrente de luz alumbra, por primera vez, esas cavernas interiores en las que has  hibernado en los últimos meses.

 

     Te preparas un café y sales a la terraza. Hay un colegio en frente y un griterío de niños reviste de una alegría inocente, extraña,  imparable a los rayos de sol, que te parecen más brillantes que nunca. Dos brochazos de una blancura reluciente,  desafiadora,  llena de íntimo orgullo, parecen salirse del cuadro e inundan tu retina. Son esa pareja de almendros, que exhiben sus galas de fiesta que dormían en el armario. ateridas de frío y que, hoy,  visten de organza, y de espuma, esa esquina del jardín.

 

     Hay dos adolescentes que se besan al sol apoyados en la verja con los ojos cerrados. Y algo en ti, también se emociona y te conmueve: Será el milagro de la primavera. Será ese pálpito que todavía late abriéndose paso, un año más, entre tanta frustración y desesperanza.  Será esa savia nueva o, al menos, renovada, que cura las heridas del cansancio, y de la desazón.  Será esa nueva oportunidad  que nos da la vida de participar en ese coro que llena de estruendo, y de color,  la naturaleza , que nos rodea.

 

     Un pajarillo se posa por un momento en la balaustrada y nuestras miradas se cruzan fugazmente.  Luego, lleno de vivacidad, de gracia, de hermosura, en un escorzo velocísimo se lanza al espacio y me invita, o eso creo yo, a que me deje caer también al vacío, sin frenos y sin paracaídas, para columpiarnos los dos en ese rayo de sol que cruza el aire esta mañana y la llena de la pureza de cuando éramos niños.





Y, para celebrar la llegada de la primavera, un regalo para mis lectores:nueva edición de una de mis novelas más leídas, con esta oportunidad única que tardará mucho en repetirse. Te invito a que te acerques a ella si todavía no la has leído. ¡Pasarás un buen rato! ¡Hay que entrar en la primavera con buen pie!

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viernes, 21 de marzo de 2025

POEMAS DEL ÚLTIMO CAMINO.

 

Hace ya bastantes años yo tuve un delicado tema de salud. En un chequeo me descubrieron algo que podía ser sumamente peligroso. Cosa que, desgraciadamente, se confirmó en las pruebas posteriores.

El escritor tiende a literaturizar todo lo que le ocurre.  Así nació, en aquel tiempo, aquel libro incipiente que se llamó: "Poemas del último camino". En él se encontraba este, llamado "Las últimas flores".

Algunos meses más tarde, pedí una segunda opinión médica a uno de los mejores doctores en aquella especialidad y, aunque, le costó varios intentos, por fin consiguió demostrar la intuición que él tenía con mi caso. Yo tenía una cosa rarísima, muy infrecuente, pero muchísimo menos dañina que lo que parecía. Y, afortunadamente, todavía sigo aquí.

Hoy reparo en este poema y en sus hermanos que lo acompañaban y, como todo escritor que se precie,  busco nuevos horizontes para todo aquello que he escrito, en este caso al dictado de mi terrible situación de entonces. Así que toda esta literatura de despedida formará parte de mi libro "Yo también me iré", en el que iré vertiendo sin prisa, pero sin pausa, todas aquellas experiencias y sensaciones cercanas a nuestra despedida final. Espero que la confección de este libro sea larguísima y en el entretanto escriba también libros gozosos y llenos de vida. Porque así sea.


LAS ÚLTIMAS FLORES

Ya las mariposas no vuelan
 ebrias de lontananzas.
¿No ves qué dulcemente se mueren
ahogándose entre las aguas
              que arrojó la tormenta?

Y tu sonrisa azulada,
es, tras la borrasca,
solo un cristal más,
que flota en el mar de Tasmania.

Donde desaparece nuestro pasado
y se acaba el tiempo
     y todo lo que significaba.

La luna ya no me engaña.  
Ni su bufanda hecha de algodones
y de distancia…
y de pétalos de estrellas
         rotas, apagadas.

No me pidas que no salte
la pared de la última valla.
Ni que me aleje más despacio
en esta carrera corta,
        alocada.

¿No ves que las nubes ya no me gritan?,
únicamente son
el refugio del silencio, del olvido,
el humo que se eleva
tras el incendio del alma.
                
Ya  solo me queda
el último vaso de vino
y respirar la fragancia
de las últimas flores,
esas que se mueren cada día
al borde de  los caminos.

Y que me despiden
con sus pétalos abiertos
todavía de amor borrachas,
diciéndole adiós a la vida
casi contentas
¡Como si no pasara nada!


POEMAS DEL ÚLTIMO CAMINO: LAS ÚLTIMAS FLORES

martes, 18 de marzo de 2025

EL PERIODISTA

 



Hubo una época en que yo fui periodista. En el diario Iberoeconomía. Repaso ahora algunas citas de lo que es ser periodista, que me empujaron a serlo por un tiempo:

"El periodismo solo puede ser literatura cuando es apasionado" (Marguerite Duras).

"El periodismo es una maravillosa escuela de vida" (Alejo Carpentier)

"El periodismo es libre o es una farsa" (Rodolfo Walsh).

"El periodismo sólido debe defender a los que no tienen voz, no enviarlos más al silencio" (Joanna Douglas).

    Todo esto para decir que el diario Iberoeconomía ofrece ahora todos mis artículos juntos para el público lector. En este link:https://iberoeconomia.es/author/francisco-rodriguez-tejedor/

     Muy agradecido, pues, por este detalle a Iberoeconomía, cuyo slogan es "España en positivo". Por eso, entre otras cosas, escribí una temporada para él, recordando a Jorge González Moore: "El verdadero periodismo debe ser constructivo", al menos para compensar aquel dardo lanzado por Roger Wolfe, sobre algunos periodistas: "Lanzan la mierda, y luego se lavan las manos".

     Espero que, al que tenga curiosidad, le gusten.

   www.franciscorodrigueztejedor.com

viernes, 14 de marzo de 2025

AMOR Y DESAMOR

 







Hace ya una docena de años, ¡cómo pasa el tiempo!, yo publiqué en la editorial Alhulia y, posteriormente,  en Amazon una obra que fue nombrada como "libro del día" por la Biblioteca Nacional del Perú, entre otros reconocimientos. Está disponible también en Audiolibro en la sugerente y aterciopelada voz de Albert Cortés, publicado por Editorial Audible. Se llama: "Los mejores 101 momentos de amor y desamor". Una forma resumida de hablar porque, en el texto,  el número de ellos es mucho mayor.


Aquí os dejo un par de ellos:

CÓMO FUE

Cómo fue. Y yo qué sé. A mí no me lo preguntes, amigo. Apareció con su vestido lila. Y nos miramos. Y todos los planetas, los míos quiero decir, se pararon en sus órbitas para verla.

Luego bailamos. O era el mundo dando vueltas a nuestro alrededor. Nos besamos contra aquel árbol. Y te juro que llegué a mi casa, loco de alegría, saltando en la calzada de coche en coche. Te llamo para decirte que me ha ocurrido, amigo. Que no me cabe dentro. Todo lo que está escrito en las estrellas y en las palmas de mis manos me está pasando.


LA CARTA

Hundido en un rincón, te escribo desde el ángulo oscuro de las perdidas batallas. Desde la umbría donde mana la ausencia y se encharca el reloj de las horas muertas.

Te escribo con las palabras heridas, quebradas alas de las palomas rotas. Y mojo el papel con la calenturienta tinta de este alcohol amigo que, pleno, corre por mis venas.

Aunque esta calcomanía de mi alma a ti yo no te la remitiré.

Para que nunca recibas y jamás sepas de esta punta de ceniza en que me convierto, cuando tú me dejas.


Ahora en una nueva edición: En Amazon.

https://shorturl.at/1LdbD



sábado, 8 de marzo de 2025

"REGRESO AL SAUCE CURVO" CADA DÍA GUSTA MÁS.

 





        Hoy, el segundo más deseado de su género.

        Nada me alegra más, que un libro tan intimista y personal como este, llegue cada vez con mayor fuerza al gran público.

        Al igual que hicieron sus hermanos: MEMORIAS DEL SAUCE CURVO y LEJOS DEL SAUCE CURVO.

        Disfrútalo  en Amazon https://t.ly/05tJH. Una gran historia de amor, romántica y conmovedora. Un retrato de nuestra época.

domingo, 2 de marzo de 2025

VUELTA AL TAJO

 






   Acabo de llegar. Vuelvo con las pilas cargadas tras unos días contando las olas en Alicante. A mí no hay nada que me desconecte más de los problemas que estar al lado de la inmensidad del mar. Todo parece nimio a su lado.

    Además, allí duermo fenomenal y, todavía renqueante de mi reciente catarrón, me he dejado mimar y cuidar por quien puede y sabe cómo hacerlo.

    Algún día escribiré largo y tendido sobre los cuidados femeninos. Hace unas horas, en el coche, de vuelta, oigo que alguien está protestando porque las mujeres solo representan el 3,8 p.c. de los camioneros de este país. No me extraña este porcentaje tan bajo. Lo suyo es otra cosa. Vamos a ver, tiene que haber igualdad de oportunidades para que todo el mundo pueda acceder a ejercer aquel puesto de trabajo que le gusta y recibir una retribución equitativa. Una vez bien asentado esto, que a veces no lo está y hay que seguir mejorando, hay que dejar que las inercias, o la naturaleza, o las actitudes y aptitudes dibujen la marea que nos arrastra a cada cual.

   El otro día oí a una actriz que, respondiendo a la pregunta de qué pediría al hombre actual, contestó: que sea más amante de los cuidados, que cuide a su pareja, a su familia, como hacemos nosotras. Nada que decir respecto a la primera parte de la respuesta, ahora bien, lo segundo creo que hay que matizarlo. Ese "como hacemos nosotras", a los hombres nos resulta imposible. Mejor dicho sería, que no nos sale de nuestro natural.Quizás como a esta actriz, que no pesará más de cincuenta kilos, le cuesta horrores sacar del coche y arrastrar una pesada maleta, o abrir la puerta de su casa encallada. 

    Todo esto para decir que los cuidados femeninos son admirables. Creo que hay algo de vocación, pero, también, de habilidad, de paciencia. Yo qué sé. Pero, qué seríamos sin ellos.

    Yo, hasta estoy pensando ponerme malo de vez en cuando, para disfrutar de ellos sin límite ni medida.

     ...Bueno, olvidemos ese nirvana, demos merecido descanso a nuestras mujeres y aterricemos en nuestra realidad.

     Y hoy mi realidad es placentera a más no poder. Nuestro hijo nos comunica que ha conseguido ser admitido para hacer el último semestre de su MBA en la prestigiosísima universidad de Wharton. Una de las mejores del mundo y, en finanzas, sin duda la mejor, por delante de Harvard. No es fácil obtener plaza en ella. Tienes que tener un currículum y unas notas académicas a su nivel. Yo, me alegro muchísimo, claro. La última vez que vino por Madrid estaba algo bajo porque no había conseguido otras cosas que también ansiaba, por poco, pero se había quedado fuera. Esto le compensa de todos sus sacrificios. ¡Enhorabuena! Cómo he disfrutado de la nota que hoy cuelga en su Linkedin.

     A pesar de los mensajes de una buena parte del gobierno y de la sociedad española, todavía hay muchos jóvenes que se esfuerzan, que creen en el sacrificio y la meritocracia. Serán los que tiren de nuestra sociedad en los próximos años. Se forjan en un ambiente exigente y competitivo que también les supone superar muchas frustraciones que la sana ambición también produce. Así que yo, muy contento, por estar al lado de jóvenes como ellos.

    Y como la felicidad de esta vida son momentos, para rebajarme los humos, sin duda, mi salud, que últimamente está maltrecha, me envía un dolor agudo y punzante a una articulación de la mano izquierda. Debe ser artrosis, mi madre también la tuvo. Es molesta, desagradable, y me cuesta agarrar bien las cosas con esa mano. Así que lo primero que haré mañana es ir a mi reumatólogo, ya me infiltró una vez, a ver si, con un poco de suerte, me alivia y me olvido de esto por una temporada. Eso debe ser la vejez sin duda, y una forma de transitarla, es tener mala memoria. Olvidarnos que los males a nuestra edad se cronifican y cada vez tienen menos remedio. Yo, en cuanto me alivie el médico, dejaré de pensar en esta y otras goteras que me acechan.

     Vuelto ya a la gran ciudad, me acuerdo de un relato que escribí yo precisamente sobre ella y la manera de vivir a la que nos empuja. Ahí va:


UN HOMBRE EN LA CALLE

Un hombre iba por la calle. Caminando por la acera. Llegó al semáforo, justo cuando se ponía verde para los peatones. Pero él no cruzó.

Lo vieron tocarse el pecho un momento y luego agarrarse a la farola. Hasta que, de repente, cayó de bruces, medio cuerpo en el carril bus y otro medio en la concurrida acera.

Hubo una inicial sorpresa. Como si el mundo de repente se parara.

Los de la acera hicieron un corro rodeándolo un tanto estupefactos, mientras fijaban firmemente sus pies en el suelo, para aguantar las acometidas de los de detrás, que querían saber lo que pasaba.

El autobús frenó unos metros antes de su cuerpo. Y el conductor y los de delante esperaron, ansiosos, que el camino se despejara. Los de detrás, que son lo que más prisa tienen siempre, empezaron a increpar al conductor al momento.

Alguien pensó que estaban rodando una película. O un reality show. Y rápidamente sacó su móvil. E hizo una foto. A los pocos segundos, ya estaba en Twitter y en Facebook. Pero no una vez, decenas. Puesto que todos los espectadores habían hecho lo mismo

Pero no era una película. El actor no se levantaba. Y solo hacía falta verle la media cara que enseñaba, con la boca abierta y los ojos extraviados para intuir que estaba muerto. O medio muerto.

Entonces todos, al unísono, llamaron al 112. Eran tantos que se bloqueó la línea por unos minutos. Por fin, después de pedirles mil detalles, enviaron al Samur.

Mientras tanto, alguien pretendió acercarse. Todos lo miraron como a un loco. Inclusive él mismo retrocedió recordando los líos que tuvo la última vez que socorrió a un motorista tendido en la carretera. Papeleos, juicios y hasta amenazas del propio accidentado, para que no declarara que iba sin casco.

Así que llegó el Samur y nada pudo hacer ya. Tal vez si alguien al menos le hubiera dado la vuelta al hombre, hubiera aguantado respirando unos minutos.

El autobús volvió a arrancar y las gentes de la acera se miraron unos a otros felices. A ellos no les había tocado. Por lo menos, esta vez.








Para olvidarme de la gran ciudad, siempre me queda el alivio de que me esperan estas puestas de sol, echado en mi tumbona de mi cabaña de Alicante. Donde el tiempo no pasa y la prisa se desvanece. Ya empiezo a soñar con ellas de vuelta.

REGRESO AL SAUCE CURVO, una novela inolvidable, para recordar nuestra vida: en Amazon https://t.ly/05tJH

martes, 25 de febrero de 2025

ESCAPAR

 


Me escapo unos días a Alicante a terminar de recuperarme. La vida es huir y buscar nuevos horizontes, para luego sentir el placer de regresar.

Pasadlo bien. ¡Nos vemos a la vuelta!

Aquí os dejo este ESCAPAR:


Escapar

Si fuera posible
atravesar esta oscuridad.

Si fuera posible
huir de esta prisión,
escapar.

Romper estos lazos invisibles,
elevarme sobre la ciénaga,
poder volar.

Ir atrás en el tiempo,

si fuera posible,
volver a respirar.

Perderme entre la gente,
sin rastros del pasado,
vivir como un niño,
volver a empezar.

No me digas que sueñe,
que cree mundos nuevos,
que me vuelva a levantar.

Sólo quiero cerrar los ojos,
apagar la luz,
de este desván.

Solo quiero ser libre,
con otras cadenas,
en otro lugar.

Volver a ser cobarde.
Perder la cabeza de nuevo,
que sea otra vez lunes
…y escapar

Solo quiero eso,
escapar de aquí,
contigo,
huir los dos muy lejos
y buscar el mar.





lunes, 24 de febrero de 2025

RELATOS DE FEBRERO: "UNA NOCHE DE INVIERNO"

 






UNA NOCHE DE INVIERNO

 

Llegas a casa aterido de frío. Y de soledad. Los amores, desperdigados y lejos. Tú sabes cuán lejos. Metes la llave en la cerradura. La puerta se abre. Y notas un calor extraño. De un hogar que creías marchito.


 Pero todo funciona. Todo está en su sitio de nuevo. Ella ha vuelto. Hay un florero lleno de rosas en el salón y la calefacción puesta.

 

Te quitas el abrigo y dejas que escurra el paraguas. El loro en su jaula, con el silencio pétreo de la anochecida, te mira impertérrito. Y tú a él. Te gustaría saber qué ha pasado. Todo lo que él guarda en su memoria observadora y callada.

 

Antes de llegar al armario ves su nota. «He vuelto». «Eso ya lo sé», respondes en voz alta, como haría el loro, si hablara. Las preguntas sin embargo se quedan en tu interior. "¿Por qué?" "¿Dónde estás?". Y, sobre todo, «¿hasta cuándo?».

 

Entonces el pestillo vuelve a girar y aparece ella. Más hermosa que nunca. O tan hermosa como siempre, te corriges a continuación.

 

«Estás empapado», la escuchas. «Anda, ven».

 

El tiempo es una sucesión de estaciones. La abrazas mientras miras por el cristal cómo llueve en silencio. La vida es una sucesión de regresos. Y de despedidas. Mañana no hará sol. Y pasado mañana tampoco. Lo has consultado con tu móvil. Hace sólo unos pocos años todavía tendrías la incertidumbre de la sorpresa. Hoy hasta la lluvia y las nubes obedecen a la tecnología.

 

Hoy es una noche de invierno. Y ella duerme entre tus brazos. Mientras la lluvia musita su dulce melodía tras los cristales. Es verdad. Mañana no hará sol. Y tú no sabes lo que pasará mañana. Hay una nota en el aparador: «He vuelto», dice.

 

Pero no es la primera vez. Tampoco es la primera noche de este invierno.

 

En febrero llueve mucho. Y las parejas vuelven a su nido. Y encienden la calefacción.

 

Nadie entiende por qué se enfrían, se acatarran, los corazones. Y por qué, cuando el viento silba y se abren los paraguas, todo parece empezar de nuevo.

 

El invierno lo sabe bien y el loro mete su cabeza bajo el ala. Y se dispone a dormir.

 

Todo está en su sitio. Otra vez.


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Para estas tardes y noches de invierno, no hay nada mejor que una buena lectura. Como 

EL DONANTE. "Una emocionante novela sobre secretos de matrimonio, llena de intriga, romance, venganzas y lucha por la vida". Seleccionada dos veces como Best Seller por Amazon para su club de lectura vip Prime Reading.


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jueves, 20 de febrero de 2025

UN SAN VALENTÍN MUY ESPECIAL

 




    Me resistía a ir. Pero, al final, no me quedó otra. Llevaba renqueante como una semana con un catarro extraño: apenas tos, ni mucosidad, solo una cansancio extremo. Mi mujer y mi hija me decían: "Si es que nunca llevas bufanda", a lo que yo contestaba: "Uno que se ha educado en Sigüenza, el pueblo más frío de España, no conoce esas prendas". Me insistieron tanto que, al final, fuimos a la clínica, a urgencias, más que nada para que me recetaran algo rápido. Yo pensaba solo en recuperarme y luego llevar a mi mujer a cenar y al cine, a ver María Callas, con Angelina Jolie.

   Tras una placa, analítica y varias auscultaciones, vino un médico barbudo con pinta de hippie y me soltó:"Lo ingresamos ya mismo". Me quedé estupefacto: "Pero, oiga, que es San Valentín". "Usted verá, si se va de celebración, a lo mejor luego tiene que venir a la UCI, se está formando una buena neumonía en sus pulmones". Eso eran palabras mayores.  Mi mujer me agarró del brazo: "Anda, vamos, ya saldremos otro día".

    Así que hemos pasado cuatro noches y cinco días, los dos encerrados en la habitación de la clínica, como unos tortolitos. O, como unos recién casados en el hotel, todo incluido.

    La verdad es que en esta clínica te dan muy bien de comer y tiene unas habitaciones espaciosas con cama de acompañante y todo y unas enfermeras solícitas y cariñosas. Y las vistas son muy luminosas y amplias. O, qué se yo, a lo mejor solo es que, dejando a un lado los kilos de antibióticos  y las mascarillas con las nebulizaciones, el recuerdo que se me ha quedado ha sido el de unos días relajados e íntimos, con conversaciones interminables y chisposas, a la sombra de un San Valentín amoroso, envolvente y protector.

     Así que, muchas gracias, santo, por estos días, recogidos y entrañables, aunque no te acostumbres. El mundo tiene muchas esquinas y por todas ellas hemos de transitar. Tras este enclaustramiento y, en cuanto me recupere, necesito irme a espacios abiertos y amplios, y recargar las pilas y los sueños de nuevo. 

     FOTO: el pasado verano frente al hotel donde se rodó Pretty woman, con Richard Gere y Julia Roberts, en Beverly Hills.

 

     

   

viernes, 14 de febrero de 2025

TAL COMO ÉRAMOS 2

 

Un placer reconstruir aquel tiempo de rosas de 1989. A pesar de este catarro extraño que me tiene sin saber yo no sé cómo. A pesar del escáner que falla más que una escopeta de feria. Y de las fotos que andan en mil sitios, la mayor parte inaccesibles. A pesar de la irregular digitalización de algunas cintas, y de su peculiar conservación. A pesar de que sigue sin aparecer nuestro viejo tomavistas con aquellas películas en súper 8 que lo acompañaban.

Qué más da. Nos queda la fragancia de aquel tiempo. Del aroma de  lo bien que lo pasábamos estrenando nuestra vida juntos. Y eso es indestructible.

Los fotogramas de entonces me traen: tu sonrisa, tu alegría, tu amor. El bien que me hacían, y el bien que me siguen haciendo. Somos dos planetas girando en nuestro destino, colgados todavía de la ilusión y de la esperanza de un cielo eterno y azul. Todo lo que buscaba entonces, lo sigo encontrando ahora, un poco más sordo, un poco más ciego, un poco más lento. Y un poco más enamorado. Como te decía en Tal como éramos 1.

Me gusta este caleidoscopio de imágenes que ha quedado, un poco sin orden ni concierto, solo acompasadas con la música de tres bellas canciones. Solo son algunos fogonazos del amor que transitamos por aquellos días. Algunas hebras del perfume que se nos quedaron en nuestro interior para siempre.

Ya sueño con abordar el trienio 1989-1992, en el que pasaríamos a ser tres. Sí, es verdad, los recuerdos son el perfume del alma. Lo que queda de una vida ya larga, la mayor parte a tu lado.

Ya sabes que me gusta disfrutar de aquellos momentos. Me rejuvenecen, me ilusionan de nuevo. Una suerte haberlos vivido a tu lado. 

Algún día también editaré un vídeo sobre este año tan especial que nos espera. Pero, ahora no toca, ahora hay que vivirlo, juntos, como hemos hecho desde hace tanto tiempo.

Un placer hacerte, hacernos, este regalo en un día tan especial como el de hoy. ¡Va por ti! ¡Por nosotros!

https://www.youtube.com/watch?v=sSOmsY3aU_Q








domingo, 9 de febrero de 2025

OTRO AÑO MÁS

 




Este año he tenido doble celebración de cumpleaños. La primera, cuando tocaba: el pasado domingo.

La segunda, ayer, sábado, aprovechando que mi hijo se ha acercado desde Londres para pasar el finde con nosotros.

Un cumpleaños muy especial en un año muy especial para la familia.

Buenos momentos, en la mejor compañía.

Un poco mermado por un reciente catarro que me hace parecer más viejito, pero los catarros se van y la fuerza y la ilusión por este año continúan.

Así que, ¡viva 2025!, que para mí comienza ahora. En lo personal, lo tengo cumplido, espero que todo discurra como promete.

En lo literario, estoy ahora en momentos de creatividad, dejando a mi mente libre, divagando y pensando en mi nueva novela. Hasta bien entrada la primavera, no me pondré a escribir una letra, así que tengo tiempo para ver si la historia se sostiene y me convence, a mí el primero.

En lo cinematográfico, deseando que no me reclamen este año para nada, ojalá tenga un año sabático, eso sí, pulsaré con algunas productoras a ver si ven factible sacar adelante "El donante", a cuyo guión acabo de darle los últimos martillazos. Quiero disfrutar de este año que, a nivel personal, me apetece mucho, y aplicar a ello mis mejores energías. ¡Vamos a por él! Un peldaño más en la escalinata de la vida.

Un vídeo de recuerdo en el sitio en el que solemos celebrar estas cosas: https://youtu.be/SX7YY-RT-Ow


Y un recuerdo cariñoso para mi madre que hoy hubiera cumplido cien años. ¡Siempre en mi memoria! ¡Cuántas cosas te debo!





miércoles, 5 de febrero de 2025

EL ESPEJO DE LA VIDA.

 






EL RELATO DEL DÍA: Este relato apareció como bonus track añadido a mi libro Cinco Estremecimientos, cinco novelas cortas de suspense y negras, una de ellas, "Un mundo maravilloso", fue seleccionada por la Comunidad de Madrid para su Encuentro autores / productores cinematográficos. En Amazon: https://amzn.to/39qO4Sk



EL ESPEJO DE LA VIDA



Cuando amaneció, después de pasar la primera noche en aquel islote, azotado sin piedad y sin descanso, por el viento y la lluvia, salió de la cueva y volvió a buscar una vez más en los restos del naufragio.

El barco se había partido en dos y se lo había tragado el abismo. Solo él, agarrado a una tumbona de cubierta y algunos enseres inútiles habían llegado a la playa.

Entonces fue cuando la vio flotando boca abajo en el agua. Con su vestido largo y extendido parecía una mariposa desmayada con las alas abiertas.

Cuando le dio la vuelta se sorprendió aún más. Era la maniquí de porcelana de la entrada del salón de baile.

…Han pasado veinte años, o tal vez, más. Hace mucho que ya no cuenta el tiempo, ni nada. Solo las extrañas bayas y los peces escuetos que necesita cada día.

En la cueva ella exhibe su vestido de seda y organza, impecable como el primer día y, cuando es primavera, luce en su pelo unas extrañas y vivaces florecillas.

El viento silba cada día como si no se cansara nunca y él no sabe, o sí, por qué no se ha vuelto loco todavía.

En su refugio siempre hay una sonrisa cálida y también misteriosa. Una sonrisa que se eleva más allá de las negras nubes y de la desesperanza infinita.

…Hoy, en un pequeño intervalo de sol, vio un objeto brillando en las olas. Nunca llega nada a este fin del mundo donde se encuentra. Pero esta vez resultó ser un espejo que, tal vez, llevaba flotando en los mares veinte años. O más.

A él le dio una enorme alegría y, luego, un temor muy grande, cuando se lo llevó a la cara. Sabía muy bien que, con los años, uno solo es su rostro.

Si alguien lo hubiera visto entonces, lo habría notado hasta relativamente contento.

Era casi un anciano, pero el espejo le mostraba unos ojos todavía vivaces, casi juveniles. Y una sonrisa cálida y amigable, también misteriosa. Una extraña sonrisa ajena a la desesperanza.

Y una apostura galante y enhiesta. La de un vivido y experto bailarín.